LA TRAGEDIA DEL MEDIO PELO

LA TRAGEDIA DEL MEDIO PELO

Te cuesta, cada día te cuesta más, mucho más, sos un “medio pelo” en retirada, solo te quedan los ademanes de soberbia, esa impunidad que te daba el consumo, en realidad consumir lo mismo que los ricos, esa sensación te excitaba, te producía una adrenalina especial, te convertía en aspiracional, con vocación de servicio.

Te vapulearon a medidas, leyes y decretos, pero vos ni mosqueaste porque por ahí mirarían la etiqueta barata de tu traje de clase media, que se deteriora y sufre los embates de esos que votaste, vacío de conciencia de clase y pertenencia social.

Primero te condenaron al frío y al calor estacional, con los tarifazos descomunales que aplicaron a los servicios públicos, luego te devaluaron criminalmente la moneda con paritarias esclavistas y una inflación que ronda el 50 %, para que tu sueldo sea un costo más pero casi sin incidencia.

Y ahora vienen por tu auto, con el decimocuarto aumento de los combustibles, despiadados y sin escrúpulos, para cuidar tu salud y obligarte a caminar, para que de a poco descubras que sos un “clase media” en retirada, en descenso y sin retorno, viendo cómo las políticas regresivas de los que votaste te pusieron contras las cuerdas, al borde la pobreza.

Pasaste ya de las primeras marcas a las terceras, dejaste de lado esos hábitos de extravagancia que te gustaban tanto, las cenitas afuera, la confitería, las saliditas a todos lados, la heladera marca tu decadencia y el auto descansa en el garaje, aunque los medios que consumís te digan que todo está bien, tu REALIDAD te indica otra cosa.