La Natividad venció a La Dolfina y gritó campeón en un vibrante partido
A principios de la temporada, La Natividad, el equipo manejado por Lolo Castagnola, planificó un 2023 para ser protagonista en todos los torneos. Sin embargo, había uno que tenía marcado con un círculo rojo: el Abierto de Palermo, la última parada de la Triple Corona. Y es por eso que armó un equipo con dos de refuerzos de lujo para que acompañaran a sus dos hijos, Camilo y Bartolomé. En ese sentido, llegaron Facundo Pieres y Pablo Mac Donough para soñar con la gloria, algo que consiguió el conjunto de Cañuelas luego de haber derrotado a La Dolfina, en el clásico moderno del polo, por 13-10 en una apasionante final disputada en la Cancha 1 del Campo Argentino.
Fue un encuentro de momentos. Sin grandes ventajas en el comienzo, los de verde parecía que se llevaban la victoria una vez que se superó la mitad de los ocho chukkers estipulados. De hecho, en el sexto se impuso por 3-0 y la acción lucía liquidada. No obstante, La Dolfina, el rey de Palermo, tiró de más empuje que buen juego y, liderado por Poroto Cambiaso, igualó las acciones en 10 antes de entrar en los siete minutos.
Pero en ese entonces, cuando se podía imaginar que el envión anímico iba a favorecer a los Cambiaso y compañía, apareció el juego vistoso y efectivo de los hermanos Castagnola, quienes hicieron moverse a los suyos con coordinación para golpear en los momentos justos y llevarse su segundo Abierto de Palermo. El anterior, La Natividad lo había ganado en 2021 y frente al mismo rival.
Si bien el máximo goleador en la tarde del domingo fue Poroto con siete tantos, la realidad es que Barto Castagnola fue la figura del cotejo. Se erigió como el titiritero del equipo, opacó a Adolfo Cambiaso, quien buscaba su 19º Palermo, y con sus tres goles colaboró para el triunfo.
Asimismo, Jeta marcó cuatro tantos (se convirtió en el goleador -por segundo año consecutivo- del torneo con 38) y tanto Pieres como Mac Donough hicieron tres cada uno. Se notó que no hubo una dependencia exclusiva de un nombre, hecho que sí sucedió en los de azul, puesto que Poroto hizo el 70% de los goles y sus compañeros (su padre Adolfo, Pelón Stirlong y Juanma Nero) aportaron uno por cabeza.
La palabra de los protagonistas
“No lo puedo creer. Sabíamos que iba a ser difícil, pero cuando nos juntamos para armar el equipo habíamos apuntado a conseguir esto”, dijo Barto en charla con ESPN. En tanto, Jeta agregó: “La alegría es enorme. ¡Es tremendo! Nos estamos organizando cada día mejor. Lo importante era ganar y ahora hay que disfrutar el título con el equipo, porque es lo más lindo que hay”.
Fuente: Diario Olé
Comentarios (0)
Comentarios de Facebook (0)